La Universidad de Buenos Aires tiene entre sus banderas la pluralidad de voces, la libertad de cátedra, y el respeto de las diferentes corrientes de pensamiento. A lo largo de sus 200 años de historia, las aulas de sus facultades han sido espacio de las más diversas expresiones y corrientes académicas, políticas y artísticas.
Bajo estos preceptos, nos parece un atropello la campaña que algunos medios y operadores políticos llevan adelante en los últimos días contra la exposición que Amado Boudou dará el próximo 3 de mayo en el marco de un seminario de la Carrera de Ciencias de la Comunicación de la Universidad de Buenos Aires (UBA), y que fue una decisión consensuada en el marco de la libertad de cátedras.
Independientemente de la idea que cada uno pueda tener formada en torno a la persona y el actor político que encarna Amado Boudou -quien fuera vicepresidente de la Nación y Ministro de Economía de nuestro país, con récord histórico de crecimiento-, no puede negársele, ya que no incurre en este caso en ilegalidad alguna, el derecho a la expresión y al ejercicio de sus facultades por su condición de detenido.
Desde ADUBA solicitamos el cese del hostigamiento contra su persona, a la vez que repudiamos el intento de mancillar la reputación y el prestigio de la UBA.
