ADUBA participó del debate sobre Técnica, Ciencia y Trabajo, organizado por la Secretaría de Asuntos Académicos

El pasado lunes se realizó en el Auditorio del Rectorado el debate “Impactos de la Ciencia y la Técnica ¿Fin del trabajo o transformación superadora?”, en el marco del Programa Universidad de Buenos Aires para el siglo XXI, organizado por la Secretaría de Asuntos Académicos, y del cual participaron como expositores Daniel Ricci, secretario general de ADUBA, junto con Aníbal Cofone, secretario de Ciencia y Técnica de la UBA, Esteban Ierardo y Carlos Algañaraz, docentes de la carrera de Relaciones del Trabajo de nuestra Universidad. Como presentadores y moderando el panel estuvieron presentes Hernán Sandro, Director de la Carrera de Relaciones del Trabajo, y Zulema Beltrami, secretaria gremial de ADUBA.

El encuentro, versó sobre el vínculo entre la Ciencia, la Técnica y el trabajo, problemática que fue abordada desde diferentes disciplinas y enfoques, de acuerdo con la especialidad de los panelistas.

“Al analizar el impacto que tienen las tecnologías sobre la sociedad, no debemos atarnos a los datos de una ciencia exacta. Cuando se toman decisiones que afectan a las personas, tiene que analizarse desde un punto de vista objetivo, pero también teniendo en cuenta la subjetividad de cada uno de nosotros y de las sociedades que estos impactos construyen”, sostuvo Daniel Ricci sobre las implicancias que la Ciencia y la Técnica tiene sobre los trabajadores.

Al respecto, y a los fines de ilustrar aquellos casos en que los avances tecnológicos y científicos perjudican a los trabajadores, Ricci se refirió al reciente conflicto de la plataforma PedidosYa, que despidió a 1500 trabajadores que estaban contratados en relación de dependencia para contratar “emprendedores” (trabajadores sin derechos laborales básicos) y no perder competitividad frente a nuevas plataformas que brindaban el mismo servicio bajo este modo de contratación producto de las plataformas tecnológicas. “No creo que los avances de la ciencia sean contradictorios con los derechos de los trabajadores y el bienestar de la sociedad, pero deben tomarse decisiones y haber regulaciones producto del diálogo entre las representaciones sindicales, el Estado y el sector empresarial, para que las transformaciones afecten en un sentido positivo y no negativo el trabajo”, agregó.

Además, se refirió a las posibilidades de desarrollo que permiten la ciencia y la tecnología, la necesidad de que su avance se encuentre al servicio de la sociedad, proporcionando un efecto igualador dentro de las sociedades. En este sentido, resaltó el rol de los docentes universitarios en tanto “productores y difusores del conocimiento”, con actitud crítica que nos permitan pensar el objetivo y las aplicaciones de estos avances de la tecnología y un compromiso con el desarrollo tecnológico al servicio de la sociedad.